Amnistía Internacional (AI) rechazó “el posicionamiento regresivo en consensos históricos en materia de género, medio ambiente y defensores de derechos humanos tomado por el Estado argentino en el seno de la Organización de Estados Americanos (OEA)”, al tiempo que condenó las detenciones de 33 personas en las recientes protestas contra la ley Bases y la violencia mediante el uso de redes sociales contra periodistas, sobre todo mujeres.

En un comunicado, la entidad defensora de derechos humanos se refirió a diferentes posturas que la embajadora de la Argentina ante la OEA, Sonia Cavallo, hizo la semana pasada en una reunión ordinaria del Consejo Permanente del organismo, preparatoria de la Asamblea General que deliberará desde este martes y hasta el jueves en Asunción, Paraguay.
En esa oportunidad, la embajadora Cavallo “hizo objeciones a distintos proyectos de resolución próximos a ser adoptados por la Organización vinculadas con: a) la necesidad de fortalecer la democracia, b) proteger a personas defensoras de los derechos humanos (incluyendo quienes defienden el medio ambiente) y c) contar con una perspectiva de género y étnica en los asuntos abordados por la Organización, incluyendo la importancia de reconocer la violencia sexual contra mujeres y niñas”, puntualizó AI.
“Esta semana hemos asistido a una preocupante marcha atrás en la política exterior nacional, ya que estos antecedentes se suman al anuncio de la Cancillería de suspender la participación en eventos ligados a la Agenda 2030 de la ONU, un consenso para fortalecer la paz y la justicia suscrita por todos sus Estados miembros en 2015”, añadió la dirigente.
AI envió una carta abierta a la sesión ordinaria del martes pasado para reclamar que
la Asamblea General “tome medidas urgentes para asegurar los derechos a la libertad de expresión, a la protesta pacífica y a la participación en los asuntos públicos de todas las personas”.
“Del mismo modo, han recrudecido las violencias contra personas defensoras del derecho al aborto, tanto en la región en general como en Argentina, en particular”, puntualizó AI.
“Amnistía Internacional resalta también que el continente americano es una región del mundo altamente peligrosa para quienes ejercen el periodismo. En países como Argentina, Colombia, Cuba, El Salvador, México, Paraguay, República Dominicana y Venezuela se somete a amenazas, hostigamiento, y en algunos casos incluso el homicidio y la vigilancia ilegítima a profesionales de los medios de comunicación. El uso de la violencia a través de redes digitales, con el objeto de silenciar y acallar a periodistas, en especial mujeres, líderes de la oposición, artistas y medios de comunicación, también se ha verificado en Argentina”.
“En lo que va de este año diversas personas, incluyendo periodistas que cubrían las protestas, han resultado lesionadas. Asimismo, el pasado 12 de junio, en el marco de un violento operativo policial, 33 personas fueron detenidas arbitrariamente y acusadas de varios delitos, entre ellos atentado contra el orden constitucional y la vida democrática”, concluyó AI.