Brasil

Rousseff sanciona ley que endurece penas para explotación sexual de menores

La presidenta brasileñaDilma Rousseff, sancionó hoy la ley que endurece las penas previstas contra la explotación sexual de menores de edad y que impide que los acusados de este delito se beneficien de la libertad bajo fianza, indultos o perdones de condenas.dilma-rousseff

La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, sancionó hoy la ley que endurece las penas previstas contra la explotación sexual de menores de edad y que impide que los acusados de este delito se beneficien de la libertad bajo fianza, indultos o perdones de condenas.

La ley, aprobada hace dos semanas por la Cámara de Diputados, incluye la explotación sexual de menores de edad y de personas vulnerables o el favorecimiento de la prostitución infantil entre los crímenes calificados en Brasil como «hediondos», cuyas sanciones son mayores.

La nueva legislación obliga a los condenados a permanecer por un tiempo mayor en la prisión para obtener el derecho a la reducción de penas o a libertad provisional por un delito que es castigado en Brasil con entre cuatro y diez años de cárcel.

La ley fue sancionada en una ceremonia en el palacio presidencial de Planalto en el que participaron como invitados la presentadora de programas infantiles de televisión Xuxa Meneghel y el cantante Sergio Reis, conocidos defensores de los derechos de los niños.

En la misma ceremonia participaron los creadores de una aplicación para teléfonos móviles y tabletas electrónicas que permite denunciar violencias contra menores, y cuya iniciativa fue elogiada por la jefe de Estado.

«A partir de hoy Brasil cuenta con un fuerte instrumento legal en la lucha contra la explotación sexual de niños y adolescentes», afirmó la mandataria en su cuenta en Twitter.

Además de imponer sentencias más rígidas, la ley «fortalece nuestra batalla contra un crimen que hiere a nuestros niños y avergüenza al país», agregó la jefe de Estado.

«Ahora es un delito que no admite fianza a cambio de la libertad. Ahora realmente no hay cómo escapar. Si lo practicó, tendrá que pagar, y por mucho tiempo», dijo por su parte Xuxa, una de las presentadoras más conocidas de Brasil.

Xuxa participó en la ceremonia en el Palacio de Planalto tras haber sido insultada en una sesión de la Comisión de Constitución y Justicia de la Cámara de Diputados en la que fue debatido el proyecto de ley que prohíbe a los padres de familia castigar con palmadas a sus hijos o golpearlos de cualquier forma como castigo.

La presentadora es una de las principales impulsoras de dicho proyecto de ley y su presencia en el debate irritó al diputado Pastor Eurico, un líder evangélico que se opone a la iniciativa y quien recordó que la presentadora posó desnuda en una película para público adulto antes de hacerse famosa en programas infantiles.

«Ella cometió una agresión contra los niños en 1982», afirmó el parlamentario del Partido Socialista Brasileño (PSB) al vetar la presencia de Xuxa en la comisión y al pedir su expulsión.

La agresión fue inmediatamente condenada por el vocero del PSB en la Cámara baja, diputado Beto Alburquerque, quien anunció la decisión de su partido de excluir al correligionario de la lista de integrantes de la Comisión de Constitución y Justicia por la «forma intolerante» en que se refirió a una invitada al Congreso.

El mismo legislador vetado hoy propuso recientemente ante la Cámara baja un proyecto de ley que había sido archivado y que permite a los psicólogos ofrecerles una «cura» a los homosexuales.

Algunas horas después del incidente, los líderes de los diferentes partidos llegaron a un acuerdo para aprobar la llamada «ley de la palmada», que ahora será debatida por el plenario de la Cámara baja.

 

Imagen : www.lapatilla.com