Tiempo Argentino

Los dólares de Michetti: la vice culpa al mensajero y nadie la defiende

“Escupió para arriba con tal de defenderse”, dicen sus críticos dentro del PRO. Ante la revelación periodística, la titular del Senado prefirió cuestionar al medio que dio la noticia. No tuvo eco.0010258678

El robo que la vicepresidenta Gabriela Michetti sufrió hace siete meses y ocultó desde entonces volvió a ponerla en el vértice de todas las internas del PRO, y también de Cambiemos. No sólo por la tardía ventilación de un robo que fue sospechosamente guardado bajo siete llaves, sino también por la respuesta que esgrimió la segunda en la sucesión presidencial para defenderse. «Creo que soy la política con menos patrimonio del país, tengo solo la mitad de mi casa y la otra parte es de mi hijo, no tengo cuentas en el exterior, no tengo cajas de seguridad, ni un auto tengo. No he crecido en patrimonio», disparó la titular del Senado en diálogo con la radio la Red. «Yo hice todos los pasos que tenía que hacer a nivel de la denuncia, fui muy detallista a la hora de explicar lo que había pasado y lo que me habían sustraído. Lo primero que me dijeron, era que sospechaban que podría ser la custodia», confesó Michetti sin explicar por qué mantuvo el caso bajo tan lejos de la luz pública desde que ganó las elecciones presidenciales junto a Macri. El domingo, cuando la noticia estalló en los medios, bajo la firma del periodista Néstor Espósito, la titular del Senado explicó que su silencio se debió a que “estaba involucrado uno de los miembros” de su custodia.

Sin embargo, ante la cantidad de consultas al respecto, la vicepresidenta optó por el camino más corto y cargó contra la calidad informativa del diario cooperativo, luego de dudar de la veracidad de los datos acusándolo de “medio vinculado al kirchnerismo”.

“No sabemos por qué salió así, pero ella comunica sola y no nos consulta a menudo, de hecho su vocera tiene una plataforma de comunicados idéntico al de presidencia, pero no coordina mucho”, respondió un funcionario del Gobierno Nacional que integra el aparato comunicacional que reporta al jefe de Gabinete Marcos Peña. Desde que Tiempo contó que Michetti había sufrido un hurto de 200 mil pesos y 50 mil dólares de su domicilio, la vicepresidenta no pasó una tarde de domingo amable.

“Y ante las dudas que se quieren sembrar con respecto al dinero sustraído aclaro: Los 200 mil pesos declarados pertenecían a donaciones que se realizaron a la Fundación SUMA que yo presido. Siete días después tendría lugar la Cena Anual de recaudación de fondos y ese dinero había sido recaudado a tal efecto.
Los 45 mil pesos eran el dinero con el que estaba pagando una refacción en mi casa y el resto, el manejo cotidiano de una casa de familia.
En cuanto a los 50 mil dólares, se trataban de un préstamo que había recibido de Juan (mi pareja), para el pago de una maestría que yo quería regalarle a mi hijo, ya que concluía su carrera de grado en esos meses. Este préstamo está debidamente documentado en nuestras declaraciones juradas.

Sabiendo que las buenas personas bien intencionadas somos más, agradezco el enorme apoyo que estoy recibiendo de tantas personas que me quieren”, contestó Michetti en su cuenta de Facebook, con un texto que fue reproducido por la prensa presidencial.

Sin embargo, fuera de la comunicación oficial, que fue corregida con detalle, las consideraciones que repartió la vice de Macri el lunes por la mañana, cosecharon malestar y soledad. “No se entendió muy bien si hablaba de Mauricio o de Cristina cuando se escudó en el poco patrimonio que tiene y menos aún cuando se jactó de tener el dinero en el país”, se quejó un funcionario político que no tiene oficina en la Rosada, pero que cruza la entrada de Balcarce 24 varias veces al día.

El malestar que rezumaron los funcionarios del Ejecutivo, también tuvo sus réplicas en el Congreso Nacional, especialmente dentro del PRO. Al cierre de esta edición ningún diputado o senador de Cambiemos salió a defender a Michetti. Todo lo contrario: algunos destacados compañeros de bancada de la vice no pudieron ocultar sus ironías por el escarnio.

“La justicia le apunta a un oficial mayor de la Policía Metropolitana, David Juan Pablo Cruzado, custodio de la número uno en la sucesión presidencial. Cruzado fue elegido por el ex ministro de seguridad porteño y actual embajador argentino en Uruguay Guillermo Montenegro y por el jefe de la Policía Metropolitana, Horacio Giménez”, relató Tiempo Argentino antes de recordar que “Cruzado estuvo preso hasta el 16 de junio, cuando la Sala Cuarta de la Cámara del Crimen, en un fallo firmado por los jueces Carlos Alberto González y Alberto Seijas, confirmó su procesamiento por el delito de «hurto agravado por haber sido cometido mediante el uso de llave, ganzúa o algún elemento semejante, agravado por su condición de policía», le trabó embargo por 1.000.069,67 pesos, pero le concedió la excarcelación”.

El gélido acompañamiento de Cambiemos no sólo encierra el malestar por la autodefensa de Michetti, sino también por el financiamiento de la campaña que conducía la mujer mediante la Fundación SUMA +, cuyos números eran íntegramente manejados por el esposo de la vice Juan Tonelli. La última vez que el hombre pisó la Rosada fue durante la asunción de Macri, cuando fue inmortalizado junto a un presidente que bailaba desde el balcón que alguna vez ocupó Juan Perón.

Tonelli ahora escribe sobre autoayuda y mantuvo un estricto silencio estampa sobre el tema, muy parecido al que mantuvo el actual embajador argentino en Uruguay y ex ministro de Justicia y Seguridad Guillermo Montenegro.

 

Imagen :Infobae.com