La presencia de niños y niñas en lugares de venta de droga es una situación que preocupa a los fiscales federales de la provincia de Santa Fe, por lo que investigarán si los menores son víctimas del delito de trata de personas.
La investigación surgió a partir de la inquietud del fiscal federal de Rosario, Marcelo Degiovanni, quien sospecha que las bandas de narcotraficantes se aprovechan de los menores en situación de vulnerabilidad para esconder a los verdaderos responsables.
Degiovanni le había solicitado colaboración a la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex) en un caso en el que un menor de edad fue encontrado dentro de una vivienda de la localidad santafesina de Granadero Baigorria.
Según publicó el portal Fiscales.gob.ar, Marcelo Colombo, fiscal a cargo de la Protex, consideró que el empleo de niños y niñas para la venta al menudeo de estupefacientes encuadraría en el delito de trata de personas con fines de explotación laboral.
«Podría plantearse la hipótesis de que el imputado haya utilizado al menor como víctima de trata de personas y que la finalidad de explotación haya consistido precisamente en obligarlo a vender sustancias estupefacientes», dictaminó Colombo al aceptar el pedido planteado por Degiovanni.
Al parecer, la investigación logró descubrir que los menores de edad son encerrados en pequeñas habitaciones, donde permanecen sin poder salir por períodos de hasta 72 horas, sin baño y en algunos casos sin pagarles porque les descuentan la droga que ellos mismos consumen mientras venden.
Para Colombo, «no existe óbice [impedimento] para plantear como hipótesis de investigación que el menor haya sido captado por el imputado con este objeto. Sin embargo, para formular una imputación contra este último en esa línea, a criterio de esta parte faltan elementos».
El hecho por el que el fiscal de Santa Fe, descubrió la participación de menores, ocurrió el 11 de noviembre de 2012, cuando se allanó un galpón utilizado para el comercio de drogas ubicado en la localidad santafesina de Granadero Baigorria.
Los uniformados irrumpieron en la casilla luego de intentar identificar a un hombre, quien arrojó un arma del tipo «tumbera» a la vereda antes de entrar a la casa, donde había un menor intentando escapar.
Imagen : colectivoepprosario.com