Están acusados de haber participado del secuestro y desaparición de Marita Verón en el 2002. Fueron detenidos durante un megaoperativo efectuado en la ciudad de Tucumán en el que se allanaron 44 propiedades, en donde se secuestró documentación, armas y dinero.
El procedimiento fue ordenado por el fiscal federal Carlos Brito y por el titular del Procuraduría de Criinalidad Económica y lavado de Activos (Proselac), Carlos Gonella, quienes trabajaron en conjunto con funcionarios y agentes de la Unidad de Investigación Financiera (UIF) y la Policía de Seguridad Aeroportuaria.
Los allanamientos «permitieron indicios claros de actividad del narcotráfico», precisaron los funcionarios y destacaron que uno de los procedimientos se efectuó en una vivienda ubicada en Bolivia y Rivadavia, cuyo propietario Angel «Mono» Ale, quedó detenido.
En tanto, otras cinco personas quedaron detenidas, entre ellos «un informante de la banda que revestía un cargo policial», detallaron las fuentes y agregaron que con los seis personas apresadas hoy son once los integrantes del clan Ale acusados de «conformar una asociación ilícita que se dedicaría al lavado de activos, trata de personas y narcotráfico».
De esos once, permanecían con prisión preventiva desde diciembre pasado Rubén «La Chancha» Ale, María Jesús Rivero y Fabían González, mientras que otros dos integrantes continúan prófugos».
Angel «El mono» Ale es hermano de Rubén, quien se encuentra en un sanatorio privado por problemas de salud mientras cumple la orden de arresto y se lo vincula al lavado de activos originados en redes de prostitución.
También esta detenida desde diciembre pasado María Jesús Rivero, ex pareja de Ale, quien estuvo imputada en el juicio por la desaparición de Marita Verón pero finalmente fue absuelta.
El titular de la Unidad de Investigación Financiera (UIF), José Sbatella, participó en forma personal de la medida en la vivienda del «Mono» Ale, acompañado por el segundo de esa repartición, Germán Seller.
Sbatella destacó que «los delitos económicos en la Argentina tienen un promedio de 14 años para llegar a la sentencia y si es que antes no prescribieron».
«Por eso estamos satisfechos del accionar de la Justicia en esta causa ya que este es un caso líder en el país en el marco de la investigación para encontrar el camino del dinero», agregó el funcionario durante un conferencia de prensa ofrecida en la Fundación «María de los Angeles».
El titular de la UIF dijo que «los grupos mafiosos tienen desembarco en el fútbol haciendo blanqueos de dinero a través de los pases de jugadores».
Los Ale estuvieron vinculados al club San Martín de Tucumán, entidad a la que gerenciaron durante varios años, incluyendo la temporada que jugó en la Primera División de la AFA.
Carlos Gonella, precisó a Télam que «se realizaron 44 allanamientos y se procedió a detener a seis sujetos, además de secuestrar importante documentación, armas de fuego y dinero.
Según el funcionario, «la causa ya tiene 150 autos secuestrados, un importante caudal de bienes embargados, decenas de inmuebles y cuentas bancarias».
Gonella precisó que en el domicilio de Ale «se encontraron armas y dinero en una cantidad impotante que muestran indicios claros de actividad de narcotráfico».
También se hallaron «varios documentos de identidad ajenos a los dueños de las casas y material destinado a falsificar documentos», agregó el funcionario.
Entre los seis detenidos, cuya situación está definiendo la Justicia, hay un agente de la Policía que sería el encargado de informarles a los Ale sobre los operativos que se hacían en su contra «Estamos ante un concurso real de delitos con una escala penal alta, no excarcelable», resalló Gonella.
Susana Trimarco, quien acompañó a Sbatella y Gonella en la conferencia de prensa, afirmó estar convencida de que «los Ale saben lo que sucedió con mi hija Marita Verón, desaparecida hace 12 años y quiero que me digan que hicieron con ella, que la devuelvan».
Los allanamientos estuvieron a cargo del Personal de la Policía Aeroportuaria a cargo del inspector Jorge Cornejo y el subinspector Adrian Gasteluy y participaron 277 oficiales personal del departamento lavados de activos a cargo del coordinador Mateo Bermejo.
A ellos se sumó la UIF con 64 agentes, entre los que se encuentran abogados y personal de informática,
La investigación se realizó conforme con el procedimiento en base a escuchas telefónicas solicitadas en la Justicia, indicó Gonella.
«Toda la documentación está en manos del juez federal 2 Fernando Poviña y está siendo analizado por técnicos sobre nuevas hipótesis delictivas en materia de delitos económicos», agregó.
Imagen : Télam