Mediante la presente repudiamos los dichos vertidos por la conductora Liliana Paz Sosa en su programa ?Conciencia Ciudadana? emitido en el canal 4 del depto de Gral. Güeemes, provincia de Salta. La ex candidata a concejal de la ciudad de Gral. Güemes por el partido PRS en dicho programa dijo textualmente, entre otras cosas, que el feriado del 24 de marzo era en realidad ?para la memoria de los sinvergüenzas?.
Estas palabras agraviantes no hacen mas que reivindicar al terrorismo de Estado que azotó a nuestro país durante la ultima dictadura militar y que tantas victimas produjo, durante ese terrorismo de Estado se cometieron crímenes gravísimos tales como ejecuciones sumarias, desapariciones forzadas, privaciones ilegítimas de libertad, torturas, supresiones de identidades, venta de bebes, habiendo tipificado asociación ilícita de los responsables para perpetrarlos, ejecutados de manera sistemática y preparados por detenciones arbitrarias, confinamientos y exterminio en centros clandestinos de detención, que el derecho penal internacional prevé para estos delitos, la obligación de penalizar y castigar siempre, porque cuando se ejecutan, no sólo nos encontramos con la violación de derechos de una víctima individual, sino que por la magnitud de los mismos, pone en riesgo a toda la humanidad. Vulnera el derecho de gentes, al que el Estado Argentino se ha comprometido respetar y sancionar ante toda la comunidad internacional.
La Nación Argentina además de la consagración del derecho de gentes, ratificó instrumentos internacionales y regionales de Derechos Humanos, con anterioridad al autoritarismo desatado en nuestro país en el período 1.976/83, por lo que se encontraban vigentes Carta de Naciones Unidas del 26 de junio de 19 45, la Carta de Organización de los Estados Americanos del 30 de abril de 19 48, la ?Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre? aprobada en la IX Conferencia Internacional Americana en la ciudad de Bogotá, Colombia en 1948 y la ?Declaración Universal de Derechos Humanos? aprobada y proclamada por la Asamblea General de Naciones Unidas en su Resolución 217 A (III) el 10 de diciembre de 1.948. Con la misma concepción de defensa de los derechos humanos, ratificó nuestro país por decreto 6268 del 09/04/1956 la ?Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio?, por lo que a partir de nuestro sistema jurídico interno y los compromisos internacionales asumidos, no puede argumentarse impedimentos legales para la investigación, acusación, condena y ejecución de las penas que se impongan.
El Estado Argentino al ratificar los tratados sobre derechos humanos, como así también al otorgarle jerarquía constitucional en el año 1994, a los instrumentos regionales e internacionales enumerados en el artículo 75 inciso 22 de la Constitución Nacional , estableció además un proceso constitucional flexible en materia de derechos humanos, de esta manera en 1997 se le otorgó jerarquía suprema por ley 24820 a la ?Convención Interamericana Sobre Desaparición Forzada de Personas? y en el año 2003 por ley 25778 a la ?Convención sobre la Imprescriptibilidad de los Crímenes de Guerra y de Lesa Humanidad?, asumiendo un compromiso internacional y en consecuencia, se obliga jurídicamente, a no aceptar ni tolerar la impunidad normativa o fáctica, porque estaría violando el derecho penal internacional y el sistema del derecho internacional de los derechos humanos con rango constitucional.
Esta claro que mas allá de la larga lista de normas imperativas que obligan al Estado a investigar los hechos aberrantes cometidos por la dictadura militar debemos decir que el único objetivo del Estado es el Bien Común, función esta indelegable e irreemplazable por lo cual mal puede un Estado dedicarse al Terrorismo como se hizo desde el 24 de marzo de 1976 al 10 de diciembre de 1983, cuesta tanto entenderlo?
Pensamos que no, creemos que la sociedad ello ya lo ha entendido, sin importar la ideología, ninguna persona hoy puede querer que el Estado se vuelva terrorista y nuevamente se dedique a cometer delitos en contra de las personas puesto que contrariamente a ello el Estado debe velar por la dignidad de la persona. Nadie en nombre del Estado puede delinquir.
Ni que hablar del sentimiento y la reacción que pueda producir a los familiares de víctimas del terrorismo de Estado que una persona en forma liviana los llame sinvergüenzas? Que vergüenza. Familias que jamás hicieron justicia por mano propia a la espera que el propio Estado de Derecho le de Justicia.
Conviene también recordar que toda la cúpula militar fue juzgada en el conocido juicio a las Juntas que terminó con condenas para todos los procesados, y si ese procesó no continuó con las demas cadenas de mando fue por las extorsiones recibidas en aquel momento de débil democracia en los mismos tiempos que actualmente corren de pascua de resurrección, aun así se iniciaron procesos en España, Italia, Francia y Alemania, para juzgar a los militares argentinos por los crímenes cometidos contra ciudadanos de aquellas naciones.
También debemos subrayar que a su vez, las instituciones militares, depuradas de quienes participaron de la represión ilegal, hoy son parte de la democracia argentina, y no reivindican ese pasado.
Reafirmando la acción de la dictadura, sólo quedan los ex represores, sus allegados y amigos políticos, nucleados en pequeñas asociaciones o círculos privados, con el respaldo de algunos medios de comunicación, que hacen una encubierta y solapada defensa de aquellos.
Como dato, debe consignarse que las encuestas de opinión pública al momento de la derogación parlamentaria de las leyes de Obediencia Debida y Punto final, dieron un 78 % de apoyo efectivo a esa medida.
Agreguemos que por parte de los ex represores involucrados no existen signos de arrepentimiento ni voluntad de proporcionar la información que sustrajeron al abandonar la dirección del Estado, donde constaba el listado de los millares de víctimas, la forma en que se les quitó la vida, los responsables de cada hecho y el destino de sus restos. Con ellos -por su carácter de autores de crímenes contra la Humanidad- no hay reconciliación posible, sino juzgamiento y condena.
Dentro de unos días habrá un nuevo feriado, en memoria de los caídos de Malvinas, último intento desgarrador si los hay por parte de la misma dictadura de prolongar su saqueo que también arrojó víctimas innecesarias. Todo ello dentro del plan de imposición de un sistema económico de exclusión que fuera diseñado por Martínez de Hoz, iniciándose el 1 de Abril del ?76 y consolidándose durante los ?90 donde muchas de estas voces que hoy repudiamos estaban calladas y cómodas. Esta es la postura del partido que representamos.-
Pablo VIEL (Presidente)
Martín ÁVILA (Sec Gral.)