La Otra Voz Digital Directora Marta César
La Fundación María de los Ángeles adelantó hoy que pedirá el apartamiento del juez Daniel Barría, que interviene en el caso de unos restos humanos hallados en La Rioja e investiga si pertenecen a la joven Marita Verón, secuestrada en Tucumán el 3 de abril de 2002, víctima de una red de trata de personas.
La solicitud está fundada en que el magistrado trabajó como abogado defensor de Irma Liliana Medina, José «Chenga» Gómez y Gonzalo Gómez.
Estos dos últimos, hijos de Medina, fueron condenados a 22 años de prisión, imputados como coautores de «retención y ocultamiento agravado, para el ejercicio de la prostitución» en perjuicio de Marita Verón.
En el primer juicio oral por el caso, que se realizó entre febrero y diciembre de 2012 y tuvo en el banquillo a 13 acusados, todos absueltos, estuvo Medina, la supuesta dueña de prostíbulos riojanos pero que fallecida en febrero de 2013.
Tras conocerse el hallazgo de un cráneo humano calcinada que fue encontrado el pasado domingo por unos chicos que jugaban al fútbol en un predio de la ciudad de La Rioja, ubicado a media cuadra de uno de las «whiskerías» que manejaba Irma Liliana Medina junto con sus hijos José «Chenga» Gómez y Gonzalo Gómez, donde se cree que pudo haber estado Marita Verón.
Al intervenir en el caso el juez Daniel Barría, la Fundación María de los Ángeles considera que no está garantizada la transparencia de la investigación.
Marita Verón tenía 23 años el 3 de abril de 2002 cuando fue secuestrada en la esquina de su casa y de acuerdo con la investigación realizada, estuvo mantenida cautiva en la localidad de Yerba Buena, hasta ser llevada a La Rioja para ser prostituida.
El pasado 8 de abril, el tribunal de la Cámara Penal de Tucumán condenó a penas que van de los 10 a los 22 años de prisión efectiva a los diez imputados imputados por el secuestro y promoción de la prostitución en perjuicio de Marita Verón.
Imagen : www.8300.com.ar
