México, DF, 1 sep. 09.- En los últimos 20 años cerca de 520 mujeres indígenas desparecieron o fueron asesinadas en Canadá, señala la Asociación de Mujeres Nativas; sin embargo, es difícil contar con una cifra exacta mientras la policía no registre estos casos, reporta la organización no gubernamental The Women’s UN Report Program & Network (WUNRN) en su página de Internet.
Y es que las mujeres indígenas son dos veces más propensas a sufrir violencia que el resto de la población femenina en Canadá, sin que el Estado haga algo por terminar con estas desapariciones y muertes o detenga a los culpables, señaló Audrey Huntley, co-fundadora de la Coalición ?No Más Silencio?.
?Históricamente las mujeres han sido botín de guerra, como una forma de quebrantar el tejido social y la resistencia de las comunidades?, afirmó.
Huntley, de origen indígena, señala que a fines de los 90, en Downtown Eastside, una de las regiones más pobres de Canadá y el hogar de muchos pueblos indígenas, más de 65 mujeres habían desaparecido o estaban muertas.
Lo anterior, afirma, la impulsó a ser parte de la Coalición, para así contrarrestar la injusticia y la impunidad que rodea la violencia contra las mujeres indígenas en su país.
?Hoy las mujeres son nuestras principales aliadas en la concientización de la población sobre este problema, pues queremos que entiendan que la violencia y el racismo son inherentes y que necesitamos un cambio sistemático para poner fin a la opresión que vive este segmento de la población?, añadió.
Sin embargo y pese a la presión que ejercen las y los defensores de derechos humanos para que la policía trate estos casos con el respeto y la atención que merecen, aún tenemos retos por enfrentar, como la relación entre la población indígena y de la ciudad y la impunidad, reconoció.
En este sentido, las y los defensores piden al Estado se lleven a cabo las tareas de investigación necesarias para encontrar a estas mujeres y que se destine un presupuesto especial a este objetivo.
?Los hombres matan a las mujeres porque saben que no habrá represalias, pues la policía no investigará, por lo que es necesario crear condiciones sociales que aseguren a las mujeres una vida libre de violencia con mejores oportunidades de desarrollo?, puntualizó la fundadora de la Coalición ?No Más Silencio?.
En este contexto, en noviembre del año pasado, el Comité de la Convención de las Naciones Unidas sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (CEDAW, por sus siglas en inglés) instó al gobierno de Canadá a dar prioridad al combate de la violencia contra las mujeres, estableciendo un plan de acción para abordar los factores sociales y económicos que colocan a las mujeres indígenas y de minorías étnicas en mayor riesgo de violencia.
Por su parte, Amnistía Internacional elaboró un informe en el que evidencia la violencia que sufren las mujeres indígenas y el desinterés de las autoridades, como parte de la campaña mundial para poner fin a la violencia contra las mujeres. En el documento se cuenta la historia de mujeres y niñas indígenas que han desaparecido o fueron víctimas de homicidio en Vancouver, Prince Albert, Saskatoon, Regina y Winnipeg, como una grave violación a sus derechos humanos.
Cabe señalar que durante el 11 Foro Internacional sobre los Derechos de la Mujer y el Desarrollo 2008, celebrado del 14 al 17 de noviembre en Cape Town, Sudáfrica, se presentó el documental ?Go Home, Baby Girl?, donde se muestra el caso de una joven desaparecida hace más de 13 años la lucha de su familia por encontrarla y la indiferencia de las autoridades, documental que ha servido como ejemplo de lo que sucede en Canadá.
Traducción: Miriam González