La Otra Voz Digital Directora Marta César
«Cada golpe de Estado le dió privilegios a la Iglesia Católica. Estas son deudas de la democracia. Ahora que asume Francisco y dice que va a venir en diciembre se está pidiendo una reunión urgente por la reforma del Código Civil porque les molesta el acceso a los nuevos derechos», manifestó Fernando Esteban Lozada, representante de Ateos de Mar del Plata, y militante por el laicisno.
Para explicar la anterior afirmación, Lozada refirió que la Iglesia Católica recibe del Estado argentino, pese a ser éste un estado laico , 36 millones de pesos anuales en concepto de sueldos. «Los obispoc cobran unos $22.000 por mes, los seminaristas, cobran como empleados públicos, y a los curas de frontera además se le abonan viáticos».
El representante de Ateos de Mar del Plata contó también, que los sacerdotes gozan del trato de embajadores en las aduanas, pudiendo pasar valijas sin que éstas sean revisadas.
En su reflexión, Lozada afirmó que una de las cuestiones que lograron aprovechar como institución, fue durante el gobierno de facto de Onganía, en el que se les permitió convertirse en la única persona no estatal que es persona jurídica de caracter público, «lo que le da privilegios y la vuelve inembargable».
Siguiendo con este análisis dijo que la Argentina se ve ligada en muchos aspectos a la Iglesia y que la figura de Bergoglio, hoy como Papa, «se presenta camuflada, en muchos casos con una imagen similar a la de Juan Pablo II».
Lozada mencionó asimismo, que es más que seguro que habrá un empuje más extremo de la Iglesia por tener injerencia en la vida del Estado, asegurando que Bergoglio «es uno de los personajes nefastos que vivimos en la Argentina, no es conciliador, es aboslutamente retrógrado, no trae nada de renovador. Lo hemos vivido desde la clausura de la muestra de León Ferrari, siendo él uno de los promotores de esa clausura, hasta con lo de Baseotto que dijo que al ministro de Salud Ginés por repartir preservativos a los jóvenes había que ponerle una piedra en el cuello y tirarlo al mar, recordando los vuelos de la muerte. También apoyó a Von Wernich que fue juzgado y sentenciado por casos de tortura, secuestros y asesinatos que siguió dando misa desde la cárcel y a monseñor Storni en los casos de pedofilia o a Grassi. Es lo más conservador de la Iglesia», sentenció.
Manifestó además haber denunciado en 2009 la declaración de Principios de la Universidad del Salvador, impulsada por el actual Papa, que declaraba que la misma se creó para luchar contra el cristianismo, recordando que el INADI dos años después reconoció el texto como discriminatorio.
También aseguró que se debe estar atent@s ante Bergoglio, quién pertenece a la «guardia de hierro y a la ultraderecha de la Iglesia Católica», siendo además militante político.
En este sentido, Lozada relató que el nuevo Papa no deja a la Iglesia en las cuestiones de espiritualidad, sino que pretende intervenir en cuestiones seculares. «Se ha expresado en contra del aborto, trató de endemoniados a quienes se expresaron a favor del matrimonio igualitario durante ese debate».
Lozada dijo que el artículo 2 de la Constitución Nacional que dice que el gobierno federal sostiene el culto católico apostólico romano, «no nos hace un país confesional sino que se trata de un resarcimiento económico por las expropiaciones de Rivadavia, y más tarde la Corte lo aclara diciendo que la moral católica y el derecho positivo argentino están totalmente separados», asegurando además que la ministra Argibay también explica que la característica confesional es de las personas físicas no de las personas jurídicas, ya que los estados por definición son laicos.
Por último, aseguró que se tiene que tomar conciencia «que no se gobierna para un sector sino para todos y que se debe defender a las minorías, porque quién no lo haga así va en contra de la Ley de Ética Pública que dice que las convicciones personales no pueden estar por encima de las funciones en ámbitos públicos.
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