Leonardo Flores fue condenado a una pena de 16 años de prisión por los delitos de “abuso sexual gravemente ultrajante, calificado por la relación de convivencia preexistente, y corrupción de menores agravada”.
A los cuatro años de edad, Carla comenzó a ser abusada sexualmente por su padrastro, y el calvario se extendió hasta su adolescencia, cuando logró vencer los miedos y pudo denunciarlo.
Meses atrás, la joven, que actualmente tiene 20 años, pidió ayuda a la comunidad para dar con el paradero del sujeto, que se había fugado para evitar el juicio oral. Tras lograr apresarlo, ayer lajusticia de San Martín lo condenó a una pena de 16 años de prisión.
«Al fin se hizo justicia. Estoy completamente emocionada por haber llegado tan lejos. Sé que hay muchas chicas que pasaron y pasan por lo mismo. Les pido que no se callen, no tengan miedo y no se rindan. Siempre alguien las va a escuchar. Luchen por hacer justicia que todo llega», dijo Carla, tras salir de los tribunales con una copia de la sentencia condenatoria.
Los magistrados Oscar Jorge Correa, Sol Cavana y Alejandro Mora Marco Terrarosa, del Tribunal Oral Criminal 1 de San Martín condenaron ayer a Leonardo Flores a una pena de 16 años de prisión por los delitos de «abuso sexual gravemente ultrajante, calificado por la relación de convivencia preexistente y corrupción de menores agravada».
«Luego de que mi hermana Carla pudo denunciarlo, fue una enorme batalla para probar su responsabilidad. Ante la inminencia del juicio oral, en junio se fugó. Luego supimos que estuvo en Uruguay, y volvió al país ingresando de manera encubierta. La DDI de San Martín lo pudo detectar haciendo inteligencia y fue detenido el 8 de agosto.
El juicio comenzó en septiembre, fueron dos audiencias, y hoy (por ayer) fue el fallo condenatorio», dijo Matías, hermano de la chica.
El muchacho comentó que «toda la familia está contenta, satisfecha por este fallo, aunque no hay pena que pueda retirar todo el sufrimiento de mi hermana a lo largo de 13 años de abusos«, precisando que «se debe reconocer a los jueces del tribunal, pero también a la fiscal Caplif, que hicieron un gran trabajo».
«No sólo la escucharon cuando ella pudo hacer la denuncia, contando todo lo que había sufrido, sino que le creyeron en su palabra. Es muy difícil que haya condenas cuando no hay violación, pero se pudo lograr, y cabe destacar que el fallo fue unánime, con los tres magistrados votando por la condena», dijo Matías.
Durante el debate oral, además de la declaración de peritos y testigos, la víctima exhibió dibujos de su niñez, donde ella representaba a Flores, un ex jefe de Boy Scouts, con los pantalones abajo y el pene. «Esa era mi manera de contar lo que ocurría», dijo la joven.
Imagen : jujuyaldía