Pueblo Wichí

La vida de las mujeres*

Las mujeres trabajaban, hacían telares, cerámicas, alfombras; también hacían redes para pescar y yicas grandes para recolectar frutos del campo. Porque las mujeres en aquellas épocas salían al monte a buscar algarroba, mistol, chañar, porote de monte, y no sólo los frutos del campo que ellas traían, sino también en algunos casos encontraban un rocío o una iguana o un quirquincho o un conejo. Lo cazaban. Si encontraban miel de ?lachiguana?o ?extranjeras? también la sacaban y cuando ellas volvían traían mucha comida para sus hijos. Y lo hacían durante todo el tiempo del verano. Salían todos los días a buscar comida.

Ellas hacían un lugar que llamaba ?troja?. Era un lugar donde ellas guardaban todas las frutas que traían. Se juntaban por grupos de diez mujeres. Esas diez mujeres salían primero a recolectar. Al día siguiente salían otras diez y así lo hacían durante el tiempo del verano. Cuando llegaba el tiempo del invierno ya tenían toda la comida depositada y nunca les faltaba comida a sus hijos y así sobrevivían en aquellas épocas.

En los tiempos que pasaron había mujeres muy guapas. Venían los medieros o sea los contratistas, que buscaban gentes para llevar o porotear o hacer postes. Iban los hombres llevando a sus mujeres y sus hijos. Llegaban al lugar, el patrón les daba las herramientas a los hombres y las mujeres se ponían en la fila para recibir también las herramientas. Eran hachas y machetes para hacer postes. El patrón no podía creer o no le tenía fe a las mujeres, que ellas también trabajaban. A veces algún patrón se reía de las mujeres, pero cuando llegaba el día de trabajo, las mujeres se levantaban junto con los hombres. A las cinco de la mañana ya estaban despiertas, atizaban el fuego, ponían la pava y luego tomaban el mate junto a sus maridos. Terminaban de tomar el mate y se iban a trabajar junto con los hombres. Cuando llegaban al trabajo ellas se ataban o se fajaban bien la cintura y se ponían sus pañuelos y empezaban a hachar, a cortar los palos, luego los labraban y los apilaban, los dejaban listos. Cuando llegó el día que los hombres entregaron el trabajo ellas también entregaron el trabajo. El patrón sacó la cuenta de cada uno y resulta que las mujeres ganaron lo mismo que los hombres. El trabajo de ellas era de la misma cantidad que el de los hombres. Las mujeres de antes trabajaban como hombres. Eran de un grupo wichí que se llama ?wesnayek?

*El anuncio de los pájaros- voces de la resistencia indígena- Memoria étnica

Ministerio Desarrollo social de la Nación

Instituto Nacional de Asuntos Indígenas

Componente de atención a la población indígena

Coordinación del taller de memoria étnica ? Leda Cantor y Olga Silvera ARETEDE

FOTO: latinarealargentina.com