México: Encuentro Nacional Feminista

Generando transformaciones desde el feminismo

En un escenario donde ha recrudecido la violencia, más de 2 mil mujeres mexicanas participaron del Encuentro Nacional Feminista (ENF), realizado los días 27,28 y 29 de agosto pasado. Tras 18 años del último cónclave y con el compromiso de reunirse cada dos años, las mujeres concluyeron denunciando la falta de autonomía del Estado frente a las iglesias y de políticas públicas respecto de los feminicidios, en una clara afirmación sobre la visión patriarcal del Estado. Una de las organizadoras, María Elena Ortega afirmó a CIMAC que ante la imparable violencia que se vive en todo el país, es necesario aprovechar este espacio para rearticular el movimiento feminista y desde ?los feminismos? generar transformaciones.

Más de 2 mil cuatrocientas mujeres se reunidas en la ciudad de Zacatecas, México provenientes de 29 distritos del país, en un momento donde la violencia ha llegado a una escalada inusitada. Mujeres mujeres indígenas, campesinas, jóvenes, lesbianas, académicas, transexuales, políticas, activistas, urbanas, rurales y sindicalistas se dieron cita para debatir tres ejes rectores: los derechos sexuales y reproductivos, incluidos el aborto; el derecho a una vida libre de violencia, y el derecho a la libre preferencia sexual.

Durante tres días, con el prósito generar un espacio plural e inclyente las mujeres debatieron en los 18 talleres, 23 conversatorios y 23 páneles de discusión. De la agenda prevista, no faltaron el análisis sobre la pobreza, la discriminación, el aumento de la violencia, abuso sexual y trata de niñas y mujeres, acceso a la salud y a la justicia, desempleo y migración entre otros, indica la enviada especial de CIMAC.

El comité promotor del ENF dió a conocer el documento con las definiciones asumidas por las feministas reunidas, en el señalan que: ?estamos inmersas en un proceso autoritario. La guerra desatada desde el gobierno ha militarizado el país, criminaliza la protesta social e incrementa la persecución de las defensoras de los derechos humanos, justificando la subordinación de todo el sistema de seguridad nacional a los intereses de Estados Unidos?.

Más adelante, denuncian que ?las políticas públicas están permeadas por una visión patriarcal, son violatorias de los derechos de las mujeres y persiguen y penalizan el ejercicio libre de las sexualidades y de la reproducción de las mujeres? y, repudian los asesinatos de mujeres por parte de sus parejas o familiares como delitos del ámbito privado, exigiendo una definición política respecto de considerarlos feminicidios.

Sostienen que el feminismo en México se enfrenta a un recrudecimiento de la derecha visible en las distintos niveles, ?con iglesias más agresivas, un neocolonialsimo en los campos de la economía, las tecnologías agrícolas y en la educación, para desmantelar a la vez organizaciones feministas y comunidades indígenas.

Con el compromiso de volver a reunirse en dos años, las mujeres avanzaron en identificar que en la actualidad el Estado perdió la autonomía ante las ?iglesias y el capital trasnacional?, afectando en consecuencia, prosigue la declaración en ?un discurso fálsamente democrático para en realidad omitir la procuración de justicia para las mujeres, permitiendo la militarización de las zonas indígenas y de las ciudades fronterizas?, como la violencia machista de la que son víctimas las mujeres.

Mujeres indígenas
las mujeres indígenas alzaron la voz en un pronunciamiento tras la culminación del ENF, en el exigen a los gobiernos municipal, estatal y federal: ?La garantía y respeto de los derechos fundamentales, sobre todo, referente a los derechos a una vida libre de violencia para las mujeres así como el acceso a la justicia de manera gratuita y eficiente en un marco intercultural?.

Mujeres Tepehuanas del norte, Náhuatl, Popolucas, Zapotecas, Mixes, Chinantecas, Ñu Savi, Triquis, Ikoots, Nahñu, Mazahuas, denuncian que ante los festejos del bicentenario de la independencia y centenario de la revolución de nuestro país, siguen ?permaneciendo en la marginación ante la falta de compromiso y cumplimiento del Estado Mexicano en el respeto a los derechos fundamentales para nuestro desarrollo social, económico, político, cultural y ambiental con nuestros pueblos?, señala el comunicado.

Piden que se cumpla con el acceso libre, gratuito y de calidad a los servicios de salud que aún no garantizan la vida por enfermedades curables y prevenibles de las mujeres, ancianas, niñas y niños indígenas; también, el inmediato compromiso en asegurar el acceso a la educación intercultural de calidad que incluyan, temas de salud sexual y reproductiva, clara y precisa, sostienen en otro pasaje del documento.

A su vez, exigen el esclarecimiento de los asesinatos de las mujeres en ciudad Juarez, el levantamiento del estado de sitio que vive el Municipio Autónomo de San Juan Copala; y demandan celeridad para resolver los asesinatos de Teresa Bautista, Felicitas Martínez, Alberta Cariño Trujillo, Jiry Jackola, Timoteo Alejandro Ramírez, Tleriberta Castro.

Finalmente, las mujeres indígenes expresan su compromiso en ?seguir impulsando procesos de liderazgos diversos de mujeres indígenas con perspectiva de género, intergeneracional y de autocrítica cultural. Luchar por la construcción del derecho a la paz y desarrollo de los pueblos indígenas desde nuestra cosmovisión como mujeres indígenas para que se traduzca en el buen vivir.

Seguir fortaleciendo puntos de encuentros y diálogos con mujeres feministas en contra de la opresión patriarcal. Así como articularnos y establecimiento de alianzas con mujeres diversas?, concluyen en su declaración.