La Otra Voz Digital Directora Marta César
En esta edición, entrevistamos a Mirian Soledad Agüero, trabajadora doméstica paraguaya y secretaria-general del Sintradop (Sindicato de Trabajadoras Domésticas del Paraguay). Desde hace un año en la dirección del sindicato nacional, ella busca ampliar las conquistas de las trabajadoras domésticas, tales como mejores salarios, jornada de trabajo justa y reglamentación de la profesión.
En América Latina, el trabajo doméstico representa de un 4% a 10% de la fuerza ocupada en los países en desarrollo. Gran parte de la categoría está compuesta de mujeres negras e indígenas. En Paraguay, la actividad absorbe el 17 % de la mano de obra femenina, lo que corresponde a 190 mil mujeres, conforme la DGEEC (Dirección General de Estadísticas, Encuestas y Censos, 2008).
En esta entrevista, Mirian habla de las organizaciones de trabajadoras domésticas para la conquista de derechos, la importancia del apoyo a estas entidades y sus expectativas de trabajo con la ONU Mujeres.
¿Cómo transformar en derechos las reivindicaciones de las trabajadoras domésticas?
Mirian Agüero: Hace un año asumí la Secretaría General de la SINTRADOP (Sindicato de las Trabajadoras Domésticas del Paraguay). Estamos trabajando con el IPS (Instituto de Seguridad Social) y conseguimos ampliar el seguro médico para las trabajadoras. Creo que poco a poco estamos avanzando. Como sindicato, podemos implantar nuestros derechos y hacer que nuestros patrones y patronas los respeten.
En su opinión, ¿De qué manera el apoyo para el fortalecimiento de las organizaciones de trabajadoras, contribuye a la lucha por los derechos?
Mirian Agüero: Yo creo que es muy importante. Con el apoyo de UNIFEM fue posible extender nuestros trabajos a otras ciudades del interior y ampliar nuestros conocimientos sobre derechos. Eso favorece que las mujeres que están asociadas se unan y fortalezcan la asociación.
¿Cómo usted define el trabajo doméstico en Paraguay? Según usted, ¿en qué aspectos precisa mejorar?
Mirian Agüero: Creo que es un trabajo digno, pero sería mejor si las leyes nos favoreciesen. El salario de la trabajadora doméstica en Paraguay, establecido por ley, equivale al 40% del salario mínimo. Es muy poco. El trabajo sólo podrá ser digno si nos pagaran de acuerdo con las horas que trabajamos. Creo que este avance en la cuestión salarial nos favorecería bastante, nos dignificaría como trabajadoras.
¿Cuáles son sus expectativas para la ONU Mujeres?
Mirian Agüero: Espero que la ONU Mujeres dé continuidad al apoyo a las organizaciones y también pueda comprometer a otras entidades de trabajadoras domésticas, para podamos trabajar juntas para incidir más y de una mejor forma.
