Missing Children 

Doce chicas desaparecen por semana en Argentina

El caso de Constanza Gala Cancinos, de 14 años y de quien nada se sabe desde el 16 de mayo cuando fue vista por última vez en Salta, se suma a una problemática que genera tanto alarma como angustia.

Imagen : Cosecha Roja

Constanza Gala Cancinos es una adolescente de 14 años que falta de su casa en la ciudad de Salta desde el 16 de mayo.

Hoy se cumplen dos meses de desesperación, incertidumbre, angustia de sus padres, familiares y amigos.

Al margen de las pistas seguidas por los investigadores y esa siempre latente presunción de una fuga de hogar voluntaria, lo concreto es que nada se sabe de ella.

El caso forma parte de una problemática que genera 12 causas judiciales cada semana con chicas de entre 13 y 17 años que desaparecen en todo el país.

El último trabajo estadístico publicado por la organización no gubernamental Missing Children sostiene que en un año se realizaron 1.038 denuncias por casos de niñas, niños y adolescentes con paradero desconocido, de las cuales 556 fueron chicas de entre 13 y 17 años, en el marco de un fenómeno que requiere de abordajes efectivos, principalmente por el peligro que representan las redes de trata para explotación sexual, que captan víctimas dentro del país o en el exterior.

En el estudio se afirma que el 65% de los casos de todas edades tiene a mujeres como protagonistas de los hechos. 

“El 73% de los episodios representa el segmento de 13 a 17 años”, sostiene el informe de Missing Children, haciendo foco en el segmento etario más problemático.

Asimismo, en la Ciudad de Buenos Aires se registraron 457 hechos, en la provincia de Buenos Aires 497, en el Resto del país 150, y Otros 3 casos.

En torno al caso de Constanza en la capital salteña, se pueden considerar como elementos positivos que la denuncia se realizó de forma inmediata, también la labor comprometida del fiscal Justo Vaca, el acompañamiento de la comunidad y sobre todo del Colegio Belgrano donde cursa sus estudios.

Pero, lamentablemente, juegan en contra de la resolución, el paso del tiempo -hoy se cumplen dos meses- y la demora en el análisis de la computadora y el teléfono celular de la adolescente, cuestiones que contribuyen a la carencia de avances en la investigación, al mismo tiempo que crece la sospecha de una retención forzada, con el fantasma de las víctimas de las redes de trata.

“La última vez que la vimos fue cuando salió hacia sus actividades curriculares y extracurriculares de la escuela, debiendo volver a las 19.30 de ese martes 16 de mayo. Tratamos de comunicarnos con ella y no se encontraba, supimos que no fue a clase de Inglés y tampoco a Educación Física”, cuenta Javier Cancinos, padre de Gala, quien esta semana estuvo en la ciudad de Buenos Aires para ponerse en contacto con funcionarios del Ministerio de Justicia de la Nación, “en un viaje para pedir ayuda, ya que no sabemos a quien más recurrir”.

El hombre recuerda: “No demoramos en hacer la denuncia en la comisaría 1ª de Salta esa misma noche y enseguida se aplicó el protocolo de búsqueda. Se hicieron rastrillajes, se siguieron todas las pistas posibles y no tuvimos ningún resultado concreto”.

¿Cambio de indumentaria?

Se pudo averiguar que una tía de la chica la vio caminando por el Parque Bicentenario y en una posterior imagen de las cámaras de seguridad aparece cambiando sus prendas deportivas por otra indumentaria.

“Se fue sin celular, sin dinero, sin tarjeta, sin ningún objeto significativo para ella”, enfatiza el padre de Gala Cancinos, mientras su madre, en distintas declaraciones periodísticas, casi a modo de ruego, manifestó: “Es muy importante que sepa que hay una familia que la quiere y desde el primer día la busca y la sigue buscando”, abonando la teoría de la “travesura” de irse de casa, aunque los días transcurridos van en sentido contrario.

Buscan a otra joven en el Bajo Flores

Erika Griselda Aucachi Estrada es una adolescente de apenas 14 años que se encuentra desaparecida, otro caso más que se registra en el Bajo Flores, como el de Nadia Rojas, de Villa Lugano, que apareció luego de 33 días en los que no se supo que fue de ella y su vuelta a casa estuvo vinculada con un aún confuso episodio, que alimenta la sospecha sobre el accionar de una red de trata en los barrios de la zona sur de la ciudad de Buenos Aires.

Ayer, al mediodía, sus compañeros y docentes de la Escuela Media Nº 3 se movilizaron hacia la esquina de las avenidas Rivadavia y Acoyte de Caballito para “visibilizar el caso”.

Desde el miércoles 5 que no se sabe nada de Erika y al margen de la línea gratuita 102 del Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes porteño, sus familiares aportaron un número telefónico para contactarse para aportar datos fehacientes (153-009-0056), mientras la investigación está a cargo de la Fiscalía de Instrucción Nº 24 y el Juzgado en lo Correccional Nº 2, desde la denuncia que dio paso a la intervención del Programa ATAJO.

La chica mide 1,60m aproximadamente, tiene tez trigueña, es de contextura mediana, tiene cabello largo color castaño oscuro y ojos de color marrón se difundió, al mismo tiempo que la Red de Organizaciones, Docentes y Familias del Bajo Flores exigió que se agilice la búsqueda para su pronta aparición. Con carteles y fotos de Erila Aucachi se expresaron, bajo la consigna:

 “Ni encerradas, ni desaparecidas. Con vida, todas las pibas”.