La diputada Nacional del Frente de Todos, Gabriela Cerrutti, presentó, junto a otras colegas de bancada, un Proyecto de Resolución, a fin de »aplicar al Diputado Nacional Fernando Adolfo Iglesias la medida de corrección disciplinaria en virtud a lo establecido en el Artículo 66 de la Constitución Nacional, en razón de sus manifestaciones públicas instando a la violencia y al odio hacia las mujeres y sus acusaciones basadas en suposiciones que poseen un alto contenido de violencia de género mediática, simbólica, política y psicológica, dañando la moral y el nombre de periodistas actrices de nuestro país por la única razón de ser mujeres; sumándose estas manifestaciones a otras expresiones y actitudes misóginas que el diputado ha dirigido contra diputadas, funcionarias y ex mandatarias; expresiones que evidencian una inconducta moral en función al cargo para el que fue elegido al poner en riesgo la vigencia de los consensos básicos que hacen a una sociedad democrática respetuosa de los derechos humanos».

La medida solicitada obedece a las sistemáticas intervenciones del diputado Iglesias, tanto en programas de televisión como en redes sociales, denigrando , violentando a distintas mujeres, por su condición de género y en clara violación al corpus normativo de nuestro país, y tratados internacionales con rango constitucional, que protegen y promueven derechos que el diputado ignora.
Uno de los temas que sumó a la indignación de las diputadas y gran parte de la sociedad -que ya no está dispuesta a tolerar la misoginia, la descalificación, el insulto a la dignidad de las mujeres -fueron los agravios contra tres actrices, que habían visitado la quinta presidencial, por motivos laborales, situación que Fernando Iglesias, pretendió designar como escándalos sexuales.»Una cosa es tu vida privada pero, la residencia presidencial es la residencia presidencial. Me permito decir que estos escándalos sexuales ha habido con Juan Domingo Perón, Carlos Saúl Ménem y ahora Alberto Fernández.»
El odio de Iglesias contra las mujeres ,negándoles entidad de sujetas políticas, minimizando sus roles sociales y políticos ,constituyen una falta gravísima, en tanto provienen de un diputado de la Nación, quien debiera ser garante del cumplimiento de las normas que protegen los derechos de las mujeres y disidencias.
»Por lo tanto, resulta crucial como diputados y diputadas de esta Honorable Cámara salvaguardar la idoneidad moral de este cuerpo legislativo y ajustada a los parámetros de Derechos Humanos consagrados en nuestra Constitución, impartiendo acciones disciplinarias necesarias para evitar que los discursos de odio, la violencia hacia las mujeres y otros colectivos se sigan reproduciendo en nuestra sociedad, y menos aún como parte de este cuerpo legislativo» argumentaron las diputadas firmantes.
Gabriela Cerruti
Mónica Macha
Laura Russo
Hilda Aguirre
Mara Brawer
Ayelén Spósito
Patricia Mounier
Claudia Ormaechea
María Rosa Martínez
María Jimena López
Mabel Caparrós
Gisela Marziotta
Gabriela Estévez
la violencia de este funcionario publico es inaceptable.es hora de accionar,