Declararon inocente al abogado Daniel Tort

El abogado Daniel Tort, fue encontrado inocente por el juez en lo Correccional y de Garantías de 2º Nominación, Fernando Carmelo Marinaro. El letrado, había sido enjuiciado por los delitos de calumnias e injurias por Juan de la Cruz Kairuz. Además de esta imputación existía una demanda civil por daños y perjuicios de la que también fue absuelto.

El letrado fue encontrado inocente, «lisa y llanamente», al tiempo que el magistrado le recomendó al ex policía y técnico de fútbol, que vaya a «lavar su honor» ante la justicia federal en la provincia de Jujuy.

Marinaro, señaló que Kairuz equivocó el camino con esta demanda y dispuso que se hiciera cargo de las costas del juicio.

La sentencia se dictó luego de que la parte querellada hiciera uso de la representación compartida, por lo cual el acusado pudo participar de los alegatos.

Después de la exposición de Dardo Verchán, defensor de Kairuz, que comparó a las calumnias e injurias con el homicidio, diciendo que el primero es peor en cuanto la persona dañada sigue viva, siguió el turno del abogado defensor Pedro García Castiella, quien hizo una exposición técnica en la que desestimó los delitos imputados.

Tort, a su turno, no dudó en llamar a kairuz «cobarde», afirmando sus dichos en que la única demanda promovida por el ex jugador de fútbol, había sido hecha después de la muerte de Olga Márquez de Aredez, más allá de que el pasado vinculado a la represión con el que se lo relaciona, fue difundido por numerosos medios gráficos y digitales, a los que se suma el antecedente de numerosos escraches, realizados por familiares de desaparecidos.

Al momento de conocerse el fallo, estuvieron presentes, Ricardo Aredez (hijo del ex intendente de Libertador General San Martín, desaparecido en 1977), Miriam Medina (madre de Sebastián Bordón) e integrantes de organismos de derechos humanos de Salta y Jujuy.

Debe mencionarse también, que ante la decisión del juez, Aredez, se mostró conmovido , ya que su aporte fue fundamental a la causa por ser el único testigo vivo que puede asegurar que Juan de la Cruz Kairuz irrumpió junto a un grupo de tareas en su casa, después del segundo secuestro de su padre, vestido de civil, pero impartiendo órdenes como si conociera su vivienda.