Violencia sexual

CUMPLIRÁ SIETE AÑOS DE PRISIÓN Y NO PODRÁ EJERCER COMO ENFERMERO DE POR VIDA,POR HABER VIOLADO A UNA PACIENTE

Por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante por las circunstancias de realización, un enfermero fue condenado a siete años de prisión e inhabilitación absoluta para el ejercicio de su profesión. El hecho ocurrió el 15 de marzo de 2021 en un sanatorio privado de la ciudad de Salta.

El juez Pablo Farah, vocal de la Sala III del Tribunal de Juicio, mantuvo la prisión preventiva del condenado J. L. S. (39), revocó la modalidad domiciliaria y ordenó el traslado y alojamiento del imputado en la cárcel penitenciaria local.

Dispuso finalmente que, una vez firme la condena, se le realice examen genético para su inscripción en los Bancos de Datos Genéticos Nacional y Provincial.

El enfermero fue denunciado por una paciente que ingresó a la clínica el 11 de marzo de 2021 por una enfermedad crónica (púrpura trombocitopénica idiopática) que padece desde los nueve años de edad. La mujer fue trasladada a la sala de terapia intensiva debido a que no contaban con médico de planta en la sala común.

La damnificada señaló que, a las 22, le suministraron un protector gástrico, pero en terapia el imputado le manifestó que debía ponerle nuevamente esa medicación. Ella le advirtió que no correspondía porque le habían inyectado una dosis recientemente pero él le suministró la medicación (un líquido blanco en una jeringa) a pesar de su negativa. Relató la denunciante que al instante comenzó a dormirse y, al despertar a las 2.30 aproximadamente, la baranda de la cama estaba baja, ella se encontraba de costado con la ropa interior y el pantalón bajados y, al tocarse, notó que se encontraba mojada en sus partes íntimas y sentía mucho dolor en la cola.

La denunciante continuó relatando que en ese momento ingresó el enfermero, quien se asombró al verla despierta e inmediatamente aceleró el goteo del suero. Ella le insistió para que llamara a la médica de terapia, a quien le contó todo lo vivido.

La damnificada pidió que le sacaran sangre y que llamaran a la policía. En ese momento, la víctima llevaba aproximadamente cuatro días internada en el sanatorio.

El imputado cubrió una cámara de video vigilancia ubicada en la sala. En las partes íntimas de la denunciante se detectó la existencia de plasma seminal.