Chile: La carga cultural impide la inserción de las mujeres al mercado laboral

La ministra del Trabajo y Previsión Social de Chile, Claudia Serrano, consideró durante el desarrollo del seminario de lanzamiento del estudio Barómetro Mujer y Trabajo 2009, organizado por la OIT, que en pleno siglo 21 las mujeres siguen sujetas a «restricciones relacionadas con las oportunidades que se les ofrecen; la carga cultural que les impone a ellas las tareas domésticas» y «el cuidado de los hijos?, lo que en muchos casos y contra sus expectativas termina relegándolas de las actividades remuneradas pese al deseo de insertarse en el mercado laboral.

Dentro de esta actividad, desarrollada en la Oficina Subregional de la OIT para el Conosur de América Latina, se evaluaron las conclusiones de un estudio realizado entre la Comunidad Mujer, Datavoz y la OIT, el cual concluye entre otros puntos que un «70% de las mujeres inactivas desean reinsertarse en la vida laboral; y declara que no trabaja porque no puede hacerlo?.

Para la Especialista Regional en Género y Empleo de la OIT, María Elena Valenzuela, esta dificultad consiste en la imposibilidad de avanzar más en las responsabilidades compartidas dentro del hogar, entre hombres y mujeres, lo que implica trabajar dentro de las familias como también la articulación entre el mercado y el Estado. Valenzuela destaca que si bien hoy en día ?no se cuestiona el derecho de la mujer a una vida económica independiente y la importancia de su aporte para la familia», hay ciertas trabas que siguen imposibilitando su real inserción.

Debe entenderse asimismo, que en Chile de las 100.000 encuestadas un 70% dicen que desean trabajar pero no pueden hacerlo porque hay poca promoción de trabajo parcial. También otra de las problemáticas se encuentra en los sueldos, ya que estarían dispuestas a ingresar al mercado laboral con un «determinado salario», lo cual hace prever que si lo que se desea es propiciar la participación de las mujeres en este ámbito, los estados deberían aplicar políticas para tales fines, como los subsidios que se dan al empleo juvenil, por ejemplo.

Recordemos que el primer informe Barómetro Mujer y Trabajo que fue difundido en Noviembre de 2007 permitió conocer la calidad del empleo de las mujeres y la relación existente en la conciliación entre trabajo y familia. punto central de la campaña ?La igualdad de género en el corazón del trabajo decente?, que encara la OIT desde mediados de 2008 y cuyo objetivo primordial es trabajar para la eliminación de las barreras que impiden el ingreso o precipitan la salida de la mujer del mundo laboral.

Desafíos

Cabe destacar también según el informe «Trabajo y familia» que son pocos los gobiernos que han creado marcos adecuados de política para la integración de mujeres en el mercado laboral, puesto que «las responsabilidades familiares no remuneradas siguen menoscabando la consecución de los objetivos del trabajo decente y de la igualdad entre los géneros».

Otro lugar desde donde se promueven políticas que apunten e integren a cuestiones de género «para mejorar el reconocimiento, la situación y el bienestar de quienes tienen a su cargo la prestación de cuidados familiares, tanto remunerados como no remunerados, en términos de derechos, protección social, condiciones de trabajo y representación» es la Oficina para la Igualdad de Género, que enfatiza en la necesidad de promover «medidas tendientes a reducir en forma progresiva los horarios de trabajo y la cantidad de horas extraordinarias; introducir más flexibilidad en la organización de los horarios de trabajo, los períodos de descanso y las vacaciones; promover salarios e ingresos adecuados y justos; e impulsar medidas de protección social», como así también un marco de apoyo para aquellos padres y madres que se reincorporen «al empleo luego de un período de licencia por razones familiares».

FOTO: www.buscarempleo.es