Fue acompañante internacional de activistas hostigados
México DF, 26 sep 08 (CIMAC).- Hoy, diversas organizaciones feministas y sociales realizan un mitin frente a la Procuraduría de Justicia del estado de Oaxaca para exigir se investigue e imparta justicia por el asesinato de Marcella Sali Grace, activista estadounidense, cuyo cuerpo fue hallado el pasado día 24 y quien había comentado que en fechas recientes sufría de persecución política y vigilancia.
Sali fue violada y asesinada brutalmente a 20 minutos de San José del Pacífico y hasta el momento la Procuraduría de Oaxaca, ?como es su costumbre? no está haciendo nada, a pesar de que existen testigos que dan indicios para identificar a los responsables, denuncian las organizaciones en un comunicado.
Entre dichas organizaciones están: Encuentro de Mujeres Oaxaqueñas ?Compartiendo Voces de Esperanza?, Colectivo Mujer Nueva, Consejo Indígena Popular de Oaxaca Ricardo Flores Magón, Voces Oaxaqueñas Construyendo Autonomía y Libertad, Colectivo Todas y todos Somos Presas y Presos y Encuentro de Jóvenes en el Movimiento Social Oaxaqueño.
Marcella Sali Grace nació en Estados Unidos y estaba comprometida, señala el comunicado, con ?las causas justas?. Con sus dotes de artista pintaba una manta o una pared o bailaba su danza árabe para sacar fondos para la lucha, o hacía sus conciertos con bandas de punks.
También daba sus cursos de defensa personal a las mujeres, pues conocía muy bien cómo los hombres las acosan, describen las organizaciones. Ésta era una de sus luchas, que las mujeres fuéramos libres y respetadas, dicen.
Sali estaba tan comprometida en la lucha, que fue acompañante internacional de hermanos y hermanas que están siendo hostigadas por el mal gobierno de Ulises Ruiz Ortiz, señala el texto.
El pasado 24 de septiembre, su cuerpo fue encontrado en una cabaña deshabitada, a veinte minutos de la población de San José del Pacífico, cuando un poblador fue a alimentar a unos perros que se encontraban por ahí.
Impresionado por un olor fétido que provenía de dicha cabaña, dio aviso a las autoridades municipales de dicha población, los cuales procedieron a hacer el levantamiento del cuerpo que se encontraba ya en estado de putrefacción y, después de dichos sucesos, no se dio más información a los pobladores.
Se avisó del hallazgo a Julieta Cruz, quien tenía conocimiento de que Sali había ido a San José del Pacífico. Acudió Cruz al anfiteatro de Miahuatlán, donde reconoció el cuerpo debido a los tatuajes que tenía, ya que su rostro estaba irreconocible al parecer, supone ella, por quemaduras, ya que no se explica por qué el resto del cuerpo tiene daños visiblemente menores.
Representantes de las organizaciones que firman el comunicado pidieron el número de averiguación, pero les fue negado, lo mismo que los resultados de la necropsia, bajo el argumento de que no eran familiares.
UN CASO MÁS DE LA REPRESIÓN EN OAXACA
Debido al trabajo solidario con la lucha popular del pueblo de Oaxaca, de otras luchas del mundo y contra el racismo en la frontera de México con Estados Unidos, en diversas ocasiones y a diferentes personas, Sali comentó que en Oaxaca, en fechas recientes, sufría de persecución política y vigilancia, continúa el comunicado.
Por eso, piensan que el asesinato tiene relación con la represión generalizada contra los movimientos sociales y está dirigida particularmente a los observadores internacionales. Y no descartan que los actores intelectuales sean los mismos que ordenan la represión contra el pueblo de Oaxaca que lucha por justicia y libertad.
Por la ?brutal crueldad? que ejercieron contra Sali, aclaran las organizaciones, ?no dejamos de lado que puede ser un claro mensaje dirigido a todo el pueblo de Oaxaca, así como a los compañeros solidarios de diferentes partes del mundo?.
Afirman lo anterior, con base en las recientes noticias que están circulando a nivel nacional e internacional, de que ?los appistas son los que mataron al periodista norteamericano Bradley Roland Hill?.
Les preocupa por ello la distorsión de la información que pudiera interferir en la procuración de una verdadera justicia en este asesinato y la ya evidente lentitud burocrática con la que están tratando el caso las autoridades actualmente implicadas en la investigación.
Exigen, por tanto, la inmediata agilización de las investigaciones, el pronto esclarecimiento de los hechos, el castigo a los asesinos intelectuales y materiales.