Una víctima amplió su declaración por los abusos en el instituto Próvolo de Mendoza e involucró a otros tres hombres· La joven, de 23 años, aseguró que durante el ataque los violadores usaron cadenas.
El Instituto Antonio Próvolo fue, durante años, un lugar emblemático a la hora de trabajar con personas con discapacidad. Sin embargo, en el último año salió a la luz una historia escalofriante sobre los abusos sexuales que religiosos, autoridades y empleados del lugar ejercieron sobre chicos hipoacúsicos durante años.
Una de las víctimas amplió su declaración en los últimos días e involucró a otros tres hombres, entre ellos un sacerdote, que hasta el momento no habían sido mencionados en la causa. Con este testimonio, ascienden a 9 los religiosos y empleados acusados de las violaciones en el instituto: cinco detenidos a fin de año y la monja Kosaka Kumiko que se encuentra prófuga hace un mes.
Según publica el diario La Nación, la testimonial la hizo una joven de 23 años que aseguró haber sido abusada antes de abandonar la entidad en 2006. A través de una Cámara Gesell, contó que fue atacada sexualmente por los adultos que utilizaron cadenas para someterla, al igual que había contado otra víctima. En su declaración la joven habló de tres hombres que si bien no pudo identificar, dio rasgos físicos y aseguró que uno de ellos usaba vestimenta religiosa.
A pedido del fiscal de la causa, Gustavo Stroppiana, este jueves se realizó una nueva inspección ocular en la institución en donde se secuestró nuevo material audiovisual con contenido pornográfico y también pastillas anticonceptivas. La institución está inhabilitada desde finales del año pasado.
Por la causa hay cinco detenidos e imputados por «abuso sexual con acceso carnal agravado por la guarda y la convivencia preexistente con menores, en concurso real con corrupción de menores».
Dos son sacerdotes: Nicola Corradi, trasladado de Italia a la Argentina y que arrastran denuncias por violación y corrupción de menores desde hace 50 años, y Horacio Corbacho, egresado del seminario en La Plata.
Los otros tres presos son el celador Luis Ojedam, también sordomudo, el asistente y monaguillo Jorge Bordón, y el jardinero Armando Gómez. Por ahora sigue prófuga la monja Kumiko Kosaka implicada en el caso por participación y complicidad en los abusos.