
Luego de tres años de ocurrido el intento de asesinato de Cristina Fernández de Kirchner, la Justicia condenó a 10 años de prisión a Fernando Sabag Montiel, autor material del hecho. La condena se computará con otras previas que estaban vigentes sobre el acusado y se unificarán en un total de 14 años. El Tribunal Oral Federal Nro 6 dictó la sentencia este miércoles al mediodía, al igual que para su ex novia, Brenda Uliarte, cuya condena fue de 8 años de cárcel. Nicolás Carrizo, por su parte, fue absuelto.
Cabe remarcar que, en los momentos previos a la lectura de la sentencia, Sabag Montiel había pronunciado sus últimas declaraciones, con un discurso confuso y por momentos inconexo, donde afirmó haber sido víctima de una “causa armada” donde le “plantaron un arma”, y hasta trazó un extraño paralelo con el caso del fallecido fiscal Alberto Nisman.
El juicio se inició en junio de 2024 en los tribunales federales de Retiro y, a lo largo del desarrollo en estos meses, incluyó las declaraciones de unos 157 testigos. Nicolás Gabriel Carrizo, señalado en un momento como jefe de la banda “Los Copitos”, permaneció preso desde 2022 y fue liberado al fin en agosto de este año, luego de que ni la fiscalía ni la querella formularan una acusación en su contra en la etapa de alegatos finales.
“Los hechos imputados a Sabag Montiel encuadran en los delitos de homicidio agravado por alevosía, por haber sido perpetrado mediando violencia de género en su modalidad de violencia política y por el empleo de un arma de fuego en grado de tentativa en calidad de autor penalmente responsable en concurso ideal con el delito de portación de un arma de guerra sin la debida autorización legal en carácter de autor penalmente responsable. Estos en concurso real con el delito de receptación de un arma a sabiendas de su procedencia ilegítima dado que su numeración había sido suprimida en calidad de autor penalmente responsable”, sostuvo en agosto la fiscal Gabriela Baigún.
En cuanto a Brenda Uliarte, se la imputó entonces “en calidad de partícipe necesaria penalmente responsable” de la tentativa de homicidio. Para la fiscal Baigún, la imputada había realizado un “aporte material-intelectual”, con “una cooperación sin la cual el hecho no se habría podido perpetrar”. Asimismo, es sindicada por “motivar” de diversas maneras al autor, incluso acompañarlo al lugar. Sobre la tenencia de arma, Uliarte terminó excluida.