Una de las víctimas de torturas en Güemes lloró al testificar en el juicio a los policías

En el Salón de Grandes Juicios de la Ciudad Judicial comenzó ayer la audiencia de debate contra los policías Marcos Gabriel Gordillo, Héctor Raúl Gabriel Ramírez, Leonardo Esteban Serrano, Matías Eduardo Cruz y Alberto Antonio Ontivero, acusados por el delito de imposición de torturas, y contra Roberto Augusto Barrionuevo, por omisión de denunciar el delito, ya que fue quien filmó lo ocurrido en el patio de la comisaría de General Güemes y que luego se subió a las redes sociales.
La audiencia está a cargo de los jueces de la Sala III, Carolina Sanguedolce (presidenta), Martín Pérez y Mónica Mukdsi (vocales).
El hecho que se les imputa a los seis policías se produjo en 2011, en el interior de la Comisaría 11 de General Güemes.
Ayer se escucharon las palabras de Mario Luis Rodríguez, una de las víctimas de los apremios que se observan en el video, quien relató lo sucedido en el mes de julio de 2012 mientras se le exhibieron las imágenes que tomaron trascendencia pública y que se filtraron en las redes sociales, lo que provocó la denuncia.
El entonces adolescente al recordar se quebró durante su relato agregando que fueron hechos que no se olvida. La testimonial llevó un par de horas y en el relato se conocieron detalles tales como que ese procedimiento se había repetido en al menos 15 oportunidades.
«Cuando ocurría algún delito, en Güemes, directamente me «chupaban» me torturaban, y me largaban, con la amenaza que debía averiguar datos, sino sería torturado otra vez», dijo.
«Esto muestra que ese era el mecanismo de trabajo en la Comisaría 11», dijo el querellante en el caso que representa a Rodríguez, el abogado Pedro García Castiella, al ser consultado por Nuevo Diario.
En su testimonial Rodríguez habló de la presencia en esa oportunidad de otros policías de apellido Cardozo, Argañaraz, y Quispe quienes no figuran en esta causa.
La segunda víctima, Miguel Angel Martínez, que está detenido por diversos hechos, testificará hoy ante el tribunal, a la vez que fueron citados a declarar el actual jefe de Policía, Marcelo Lami, y el entonces secretario de Seguridad Eduardo Sylvester.