La Otra Voz Digital Directora Marta César
El Tribunal Oral en lo Criminal N° 16 ratificó hoy la pena de 50 años de prisión para un sujeto condenado por haber golpeado, amenazado de muerte y violado a ocho mujeres en los barrios porteños de Villa Del Parque, La Paternal y Agronomía.
La decisión fue tomada por los jueces Gustavo González Ferrari, Inés Cantisani y Alejandro Noceti Achaval, quienes ratificaron la pena que pesaba contra el condenado Fabricio Albarracín, de 32 años y además declararon su reincidencia.
En el fallo, el TOC N° 16 señaló que «Albarracín cosificó a las víctimas en virtud de su sexo, colocándose en una situación de dominio absoluto sobre ellas, las sometió a una violencia extrema y sumamente degradante».
Déborah Huczek, abogada de dos de las víctimas, señaló a NA que «hoy 7 de abril se dio lectura de la sentencia en la cual en un acto de rebeldía institucional por parte de los tres jueces que componen el TOC N°16, desoyendo la orden impuesta de su superior dictaron nueva pena, la cual se impuso tal como lo habíamos solicitado las querellantes y el fiscal la pena de 50 años de prisión y declaración de reincidencia».
Además, la letrada comentó que «nuestro país asumió el compromiso de velar con especial ahínco por la protección de los derechos de las víctimas de delitos de género y en base a ello y a lo establecido en la Convención de Belem do Pará los Estados tienen el deber de condenar todas las formas de violencia contra la mujer».
Huczek consideró que la condena impuesta al acusado y ratificada este martes resulta ajustada a sus actos y a la ley y remarcó: «Los jueces del Tribunal consideraron que en relación a la culpabilidad por el hecho la pena de 50 años establecida como tope resulta proporcional, adecuada y ajustada a derecho».
El Tribunal tuvo que resolver este martes si ratificaba o no la condena por un pedido que había realizado a Sala 1 de la Cámara Federal de Casación Penal que había solicitado que le bajaran la pena.
En un polémico fallo emitido en mayo de 2014, la Sala 1 había considerado que la condena impuesta a Albarracín era «cruel e inhumana» y por ello exigió al Tribunal que revisara el monto de la pena y le otorgara al condenado la posibilidad de obtener beneficios de salidas transitorias.
Albarracín había sido condenado a 50 años de prisión en el 2011 por los delitos de «abuso sexual simple y con acceso carnal, exhibiciones obscenas, robo con uso de arma, amenazas coactivas y privación ilegal de la libertad».
La Justicia determinó que el hombre golpeaba, amenazaba de muerte, robaba y violaba a mujeres de entre 25 y 30 años, a quienes atacaba cuando llegaban a sus casas simulando ser un empleado de delivery.
Albarracín habría cometido los ocho delitos que se le imputaron entre los años 2008 y 2009, en el momento en el que se encontraba cumpliendo libertad condicional en una causa en la que había sido condenado a 4 años de prisión por delitos también de naturaleza sexual.
Cuando la policía logró detener al hombre en la casa en la que vivía con su madre en el barrio de Flores encontró una cantidad de ropa interior femenina que sumaban más que la cantidad de hechos investigados, por lo que los detectives sospecharon desde ese día que el hombre habría cometido más ataques.
Imagen :inforegión.com.ar
