El juez José Luis Riera, vocal de la Sala VI del Tribunal de Juicio en feria, condenó a M. A. R. (37) a la pena de once años y seis meses de prisión de ejecución efectiva por resultar autor penalmente responsable del delito de abuso sexual con acceso carnal doblemente agravado por el vínculo, la guarda y la convivencia (delito continuado).

El juez dispuso que el condenado permanezca alojado en la Unidad Carcelaria 1 para el efectivo cumplimiento de la pena impuesta.
El imputado es padrastro de la víctima, menor de edad al momento de los hechos. La damnificada contó que los abusos de M. A. R. comenzaron cuando ella tenía 15 años. Sucedían cuando su madre se iba a la Iglesia Universal y el imputado no iba a trabajar y se quedaba en la vivienda para poder abusar de ella. La joven contó que los hechos fueron continuados y que el 26 de noviembre de 2016, cuando su padrastro supo que tenía novio, la golpeó a ella y a su madre, argumentando que si llegaba a quedar embarazada dejaría de estudiar.
La damnificada sostuvo que no había contado antes lo sucedido porque su padrastro la amenazaba diciéndole que si lo delataba, arruinaría a toda la familia.
Nota: Se omitió el nombre completo de las personas involucradas para preservar la identidad de la víctima y su derecho a la intimidad y confidencialidad.