La Otra Voz Digital Directora Marta César
El «Panamá papers», que explotó este lunes en todo el mundo, también destapó las estrategias de varios personajes ricos que utilizan los servicios de Mossack Fonseca para mantener a sus ex mujeres lejos de sus bienes.
Los más de 11 millones de documentos obtenidos por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) y el diario alemán Süddeutsche Zeitung muestran no sólo las operaciones de famosos políticos, futbolistas y artistas de todo el mundo, sino también de millonarios en proceso de divorcio.
De acuerdo a un informe de El confidencial, Martin Kenney, un especialista en recuperación de bienes de las Islas Vírgenes Británicas que trabajó en representación de esposas de Rusia, el Reino Unido, Suiza y Estados Unidos, le dijo a ICIJ que «un marido deshonesto es tan estafador como Bernard Madoff». «Las compañías ‘offshore’ y las fundaciones son instrumentos en un juego de ocultación y encubrimiento«, aseguró.
Durante décadas, los cónyuges –casi siempre hombres que forman parte del uno por ciento más rico– solicitaron ayuda a Mossack Fonseca para ayudar a proteger bienes de sus ex parejas, de acuerdo a los documentos.
En Tailandia, la firma ofreció ayuda a un esposo que pedía en un correo electrónico «una bala de plata» en caso de que su esposa intentase desposeerle de sus bienes. En Ecuador, los empleados de Mossack Fonseca propusieron una empresa fantasma a «un cliente que necesita adquirir una corporación panameña para transferir bienes antes del divorcio». En Luxemburgo, los empleados se reían y enviaban emoticones con guiños cuando aceptaron ayudar a otro marido, un holandés que quería «proteger» bienes «ante los resultados desagradables de un divorcio (¡en el horizonte!)»
«No nos dedicamos a gestionar las compañías de nuestros clientes», manifestó Mossack Fonseca. «Aparte de los honorarios profesionales que recibimos, no nos apropiamos ni custodiamos el dinero de los clientes, y no tenemos nada que ver con ninguno de los aspectos financieros directos relacionados con el funcionamiento de sus negocios. Lamentamos cualquier mal uso de las compañías que incorporamos o los servicios que proporcionamos y daremos los pasos necesarios para descubrir y detener dichos usos», agregó.
Pero las esposas no son inmunes a la tentación de utilizar escondrijos ‘offshore’. En 2004, el personal de Mossack Fonseca se reunió con Marcela Dworzak, la esposa del general retiradoAntonio Ibárcena Amico, antiguo jefe naval de Perú y amigo de Alberto Fujimori. Este había sido encarcelado poco después del fin del régimen de Fujimori. Los documentos muestran que en Mossack Fonseca estaban preocupados por un reportaje que aseguraba que el marido de Dworzak había usado una compañía ‘offshore’ para lavar dinero con bienes inmuebles a través de Alverson Financial S.A. Para clarificarlo, Dworzak visitó los cuarteles de Mossack Fonseca en Panamá. Con los abogados a su lado, aseguró a los empleados que Alverson Financial S.A. era su compañía y que todo había sido realizado «de forma transparente, legal y limpia». Sus compañías servían para esconder sus bienes de su marido.
Imagen :lavoz.com.ar
