Por las bajas paritarias y la escasa recaudación, lxs jubiladxs y beneficiarixs de la AUH que cobran el haber básico sufrirán un recorte real en sus ingresos.
Si bien el Gobierno dispuso el pago de las sentencias y un aumento general para lxs jubiladxs de haberes medios, quienes perciben la mínima sufrirán, al final de este 2016, un fuerte recorte en su poder de compra, producto de la combinación del escaso aumento de este año y la escalada inflacionaria, según revelan los datos oficiales.
El diario Clarín deslizó que el aumento para los haberes mínimos que se hará efectivo en septiembre rondará entre el 14 y el 15%. De cumplirse ese vaticinio, casi 5 millones de integrantes de la clase pasiva y los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo, que se ajustan por el mismo índice, verán incrementados sus ingresos un 32% en 2016, si tenemos en cuenta el de marzo, de 15,3%.
Ese número está muy por debajo de la inflación interanual que mide cualquier organismo público y privado, ya que todos ubican el IPC en un rango de entre 40 y 45 por ciento interanual. Para que jubiladxs y beneficiadxs de la AUH logren aunque sea empatarle, la inflación debería caer en picada en los próximos 6 meses, algo que por el momento no se observa.
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