La Otra Voz Digital Directora Marta César
El organismo de ayuda humanitaria consideró que debido a la destrucción de unas 370 mil viviendas, sumado al derrumbe de algunos hospitales y el invierno austral, los damnificados podrían sufrir un aumento en las enfermedades estaciónales.
El representante regional de la Cruz Roja, Gustavo Ramírez, señaló que el país puede sufrir temperaturas menores a los 0 grados y «esto puede ocasionar gripes, influenzas, o también enfermedades broncorespiratorias».
Como consecuencia del terremoto varios hospitales quedaron en ruinas lo que puede complicar aún más la atención de los enfermos.
Según datos brindados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el sismo que azotó a Chile el pasado 27 de febrero dejó 521 fallecidos, 56 desaparecidos y más de dos millones de damnificados.
En la región norteña del Biobío a comienzos de mayo, los habitantes de Penco sufrieron importantes inundaciones como consecuencias de fuertes tormentas.
Algunas comunidades debieron ser evacuadas como resultado de los diferentes desbordamientos. (PÚLSAR)