La Otra Voz Digital Directora Marta César
La Comisión organizadora expresó que los medios alertaron sobre posibles ataques a la ciudad y disturbios en el marco del Encuentro Nacional de Mujeres que se realizará entre el 6 y el 8 de octubre próximo en Posadas.
Durante la conferencia de prensa realizada esta semana la Comisión organizadora reconoció : ?sabemos que existen sectores minoritarios que atacan mintiendo y difamando lo que es el encuentro?.
Una de sus integrantes recordó que desde ?hace 27 años las mujeres de todas partes de país, desde la desocupada, la campesina hasta la empresaria y la más pudiente se organiza para venir al encuentro y le preguntamos a esas personas que son las que atacan a este encuentro ¿por qué no quieren que las mujeres hablemos??
Reafirmaron que ?el encuentro es un espacio de debate, un espacio donde como mujeres adultas venimos a hablar sin tapujos, libremente de lo que sea, ¿por qué les interesa seguir amordazando a quienes no tienen voz? Públicamente hemos dicho que no daremos respuesta a sus pedidos de explicación porque basta con el ejemplo de 27 años de mostrar qué es el encuentro.?
Resulta posible aunque de que suceda será la expresión de una minoría como señalaron desde la organización dado que las mujeres, en su gran mayoría, se organizan durante todo el año para afrontar los gastos que requiere llegar como en este caso a Posadas.
Los costos de pasaje, alojamiento- aunque se garantiza alojamiento gratuito en escuelas- y comida son afrontados por las participantes que generalmente realizan actividades durante todo el año para reunir el dinero necesario.
Es una realidad que la organización familiar recae mayoritariamente en las mujeres que deben prever y desarrollar las más diversas estrategias para poder asistir con el costo personal que ello implica. En otros casos las dobles y hasta triples jornadas laborales y profesionales hacen que la situación requiera también de previsión.
La historia de los Encuentros, los temas que se discuten y los resultados obtenidos que se expresan en avances legislativos, denuncias, articulaciones en la acción despiertan resquemor en sectores conservadores y en las instituciones como la Iglesia que se niegan a reconocer la autonomía y los derechos humanos a las mujeres.
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