2014 no fue el año de las mujeres en el Atlántico

La cifra de asesinadas llegó a 43, mientras en 2013 fueron 38, lo que representa un aumento del 13%. Secretaría de la Mujer del Departamento destaca aumento de denuncias. Familiares de víctimas exigen medidas eficaces.

Rosiris Martínez Oliveros prometió frente a la tumba de su hija, Yuleidis Murcia, hacer todo cuanto esté a su alcance para que ninguna otra mujer sea asesinada, y menos a manos de alguien con quien haya tenido algún vínculo sentimental.

Que el asesino de la joven de 25 años, de quien se había separado seis meses antes, haya recibido este año una condena de 16 años en prisión pese a haberla atacado con un cuchillo frente a las dos hijas que tenían en común, es otro motivo para su lucha. El episodio, sucedido en septiembre de 2013 en el barrio La Luz -dijo-, la ha impulsado a pasar de ser una líder barrial a una defensora de los derechos femeninos.

Yuleidis fue una de las 38 asesinadas ese año. En 2014 la cifra ha subido hasta llegar a 43, lo que tiene alarmadas a las organizaciones de mujeres que actúan en el Departamento. Y precisamente, para Rosiris, una de las causas del incremento es que para crímenes tan graves haya sanciones poco ejemplarizantes. “Es que los homicidas ven que no se van tirar sus vidas en un cárcel”, apuntó.

Por eso la madre de Yuleidis estudia cuanto curso o diplomado puede, trabaja en todos los programas estatales a los que tiene acceso y les recomienda a todas las madres con las que tiene la oportunidad de dialogar que si notan que sus hijas están expuestas al más mínimo riesgo de ser atacadas, que las ayuden , las protejan, y denuncien.

“Por eso le prometí a mi hija que voy a salvar las vidas, las que pueda”, advirtió Rosiris.

Las estadísticas. La cuenta mortal prácticamente comenzó con el año. El 2 de enero de 2014 perdieron la vida Katherine Pereira Viloria, de 22 años, y Cindy Patricia Cardona, de 27; la primera en Puerto Colombia y la segunda, en Barranquilla. La más joven fue además violada.

Ese mes, el primero del año, fueron cinco las asesinadas, igual que julio y lo que va de diciembre.

El mes con más casos fue octubre con 8, de acuerdo con datos suministrados por el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses. La entidad incluye en el periodo enero-noviembre el caso de una persona en el rango de edad de 0-4 años, del que indica no contar con más información.

El arma de fuego sigue siendo el elemento más utilizado en los homicidios: en 30 de los hechos. Por lo menos 20 víctimas tenían entre 20 y 29 años.

Los registros del Forensis, informe anual de Medicina Legal, indican que la cifra global de 2014 es la mayor de los últimos cinco años en el Atlántico.

“Un solo caso es preocupante”. Para Stybaliz Castellanos, secretaria de la Mujer y la Equidad de Género del Atlántico, es preocupante la tendencia creciente, y la considera resultado de “una sociedad enferma que mata a sus mujeres, que no permite que las generaciones que siguen se puedan formar verdaderamente en valores”.

La funcionaria sostuvo que muchos casos se relacionan con el inicio a muy temprana edad de la vida de pareja.

Otro factor, en su concepto, es “la poca tolerancia, la celotipia, que es una de las principales causas en que los agresores sustentan su actuar ”. Pese a ello destacó el aumento de las denuncias de maltrato. En su oficina, desde diciembre de 2012 a la fecha están registrados 704 casos de mujeres que han recibido apoyo sicológico y jurídico.

Dos pérdidas. De los tres hijos que tuvo Rosiris solo le queda uno. Después de la partida de Yuleidis, la niña que siempre quiso tener, perdió también a Néstor, el mayor, de 30 años. Fue este año, un cáncer cerebral acabó con su vida apenas ocho meses después del homicidio.

“Se lo detectaron, y al mes se murió -contó Rosiris-. Su mujer me dice que no quería decirme cuando le dolía la cabeza porque yo estaba sufriendo mucho. Es muy duro perder a dos hijos”.