La Otra Voz Digital Directora Marta César
En la sesión del martes 26 de junio en la Cámara de Diputados de la Provincia de Salta, varios legisladores y legisladoras denunciaron que en la Corte de Justicia de Salta se han producido graves actos de discriminación en razón del género, perpetrados por algunos de sus miembros (actualmente la Corte está conformada por seis varones, uno de ellos se encuentra de licencia, y una sola mujer, la Dra. Susana Graciela Kauffman).
La Dra. Susana Graciela Kauffman es jueza de la Corte de Justicia de Salta desde el día 21 de marzo del corriente año.
Cuando la Dra. Kauffman, en ejercicio de sus facultades, quiso designar como secretaria letrada personal a una funcionaria del Poder Judicial de la Provincia, activamente comprometida con los derechos de las mujeres, miembros de la Corte se opusieron tenazmente a la designación, sin razón valedera de ningún tipo. La designación de una secretaria letrada colaboradora de un/a Juez/a de Corte no debe someterse a debate alguno, ni es decisión del cuerpo colegiado, ya que se trata de una decisión personal de cada magistrado/a la de nombrar a los/as secretarios/as de su confianza.
La funcionaria propuesta se desempeña como Secretaria de la Cámara de Apelaciones Civil y Comercial, sin haber tenido en su carrera judicial sanción alguna, imputándosele solo que ?su esposo habló mal del Dr. Gustavo Adolfo Ferraris y por ende de la Corte?. Este hecho también resulta altamente discriminatorio al no considerársela en forma personal como sujeto de derechos, calificándola en forma expresa en reunión de Corte como ?accesorio? del marido. La actualmente secretaria de cámara, fue secretaria letrada de la Corte durante menos de 30 días en el año 2008, cuando fue trasladada sin que ella supiera, hasta ahora, el motivo de tal ?traslado?.
El hecho atribuido al esposo de dicha funcionaria ocurrió con motivo de la cuestionada designación del Dr. Ferraris como juez de Corte, cuando el Colegio de Abogados de Salta interpuso un recurso de amparo por la supuesta ilegitimidad de esa designación. El amparo fue acompañado con decenas de firmas de abogados/as del foro entre los cuales se encontraba el marido de la funcionaria. El Dr. Ferraris se viene excusando con los/as abogados/as que firmaron el amparo; sin embargo, ahora se revela que el encono trasciende lo ajustado a derecho, para situarse en el mal uso objetivo del poder por la ira subjetiva.
Se sometió arbitrariamente la cuestión de la designación a reunión de la Corte de Justicia, en donde se dijo lo anteriormente señalado, y una vez más se abusó de una ?solidaridad? masculina, intentando obstaculizar el derecho que le asiste a la Jueza Kauffman de designar una secretaria letrada de carrera judicial, con probados méritos para el cargo, y que fuera rechazada por las (sin)razones mencionadas.
Se configura así, además de un doble acto de discriminación por género, un claro abuso de poder.
La gravedad de la situación planteada justifica ser denunciada porque si una jueza de la máxima instancia del Poder Judicial provincial es avasallada de tal forma en el ámbito de sus decisiones, qué cabe esperar para las/os justiciables y para la sociedad en general.
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